- ¿A que no sabes dónde he vuelto hoy?
- ¿A espiar al vestuario? - replicó Jack con su eterna sonrisa sarcástica.
- Allí donde solíamos nadar.
- Y gritar en silencio.
Recibió la pequeña pelota roja, que le había lanzado antes en la cabeza, para que la siguiera botando repetidamente contra la pared.
También fue allí donde empezaron a soñar, a coquetear con las sustancias prohibidas, a rasgar con furia las cuerdas de sus guitarras acompañándolo con danzas frenéticas y desgarradoras y desafinadas voces, a susurrarse secretos, a confesarse (no solo al otro sino también a sí mismos) sus deseos o fantasías...
A elegir los adoquines de sus caminos, aunque ellos no lo supieran.
A decir verdad, tiempo después nunca le quedó del todo claro hasta dónde era Jack consciente en aquella época de que no solo estaba ya eligiéndolos, sino encajando los cimientos.
Armando su base para la guerra.
A veces parecía que era un adicto a toda esa evasión y otras, que tenía los pies tan firmemente anclados en la tierra como sus raíces el árbol contra el que se recostaban a viajar a las exuberantes y calurosas selvas y los misteriosos escenarios de Jack.
Sospechaba que ambos fenómenos podían ocurrir a la vez.
Diez años después todavía lo parecía y sabía que ambos confluían en Jack Laurence.
Diez años después había visto en su interior reflejos de los miedos que sabía que había dejado atrás en aquel lugar, que habían ahogado en aquel lago.
Estaba sobre el alféizar interior de la ventana. Observó a toda esa gente, andando allá abajo, y alzó la vista hacia el nublado cielo.
- Oye, Jack.
- Qué - le miró atentamente, apoyado en el lado contrario del alféizar. Captó enseguida el tono casual que precedía a alguna cuestión o pregunta importante, como si se le hubiera ocurrido en el acto y no hubiera dado más vueltas al tema que una lavadora.
- ¿Alguna vez has sentido que algo te podría cambiar la vida tanto que incluso te hubiera gustado poder creer en Dios, o haber sido creyente ya antes, para al menos tener la absurda y falsa esperanza de que prometiendo y suplicando todo iba a salir bien? - Titubeó ante la inquisitiva e intensa mirada verde grisácea de Jack - Al menos así tendrías una muleta en la que apoyarte, aunque ésta fuera de papel.
- No vayas detrás de nadie. Y si has cometido un error, asúmelo como un hombre y lucha por la solución.
- Jack, soy una mujer.
- Bah, solo en esos genitales externos. Vamos a apoyarnos en tu papel.
Y lió la hierba y, por el momento, se fumaron el problema y lo expulsaron en forma de anillos.
Anillos también aprendidos en aquel lugar, hacía una década. Todo aventura y diversión.
Porque no había nada cómo retroceder permanentemente junto a Jack a los 12 años.
martes, 23 de marzo de 2010
sábado, 20 de febrero de 2010
SOY
Título: "Soy"
Técnica: Técnica mixta. Acrílico al agua y elemento.
Máscaras.
Tú, yo, todos.
La más primitiva.
Externas, la adornan y la completan.
Simples cáscaras para la adulterada yema.
Obra presentada para la exposición "Sin Máscara".
A continuación algunas fotos del making off...
lunes, 25 de enero de 2010
Sin Máscara

Tras un tiempo pensando en abrir un blog, lo hago por fin con motivo de la exposición "Sin Máscara".
Horror Vacui es un colectivo formado por alumnos de Ilustración de la Escuela San Telmo en el año 2009, con el objetivo de exponer en dicha escuela.
Actualmente en 2º curso y tras un largo año con la idea, por fin ocho alumnos hemos colgado allí nuestras obras: Anika, Mª Carmen, Cristina, Jerónimo, Héctor, Juanfran, Elisa y servidora.
Aún están a tiempo de ir a verla hasta el día 31 de este mismo mes.
Un saludo y enhorabuena a mis compañeros.
Porque como bien dijo Jerónimo: quién expone, se expone.
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